En tiempos históricos, las organizaciones políticas hegemónicas han establecido siempre un balance entre el interés geoeconómico o geopolítico de la propia organización y el interés de los diversos grupos de presión que nadan en la piscina del poder en el hegemón.
Siempre es dificil discernir cuando se actúa por un interés o por otro. Si nos centramos en la gran potencia USA nos damos cuenta lo difícil que resulta separar los intereses del Estado y los de los negocios particulares.
La entrada en la Primera Guerra Mundial, los intereses industriales en su guerra civil, los impuestos en la guerra de independencia...etc.
Si nos acercamos a la guerra de Viet Nam no se observa beneficio alguno geopolítico que compense una derrota y unos gastos que enriquecieron a muchos.
Actualmente los lobys poderosos parecen ignorar completamente el interés nacional del pueblo norteamericano y viven imbuidos de su utopía neomaltusiana, prácticamente a nivel mundial.
No hay comentarios:
Publicar un comentario