El día 6 de diciembre se celebra el día de la Constitución Española de 1978. En este blog hemos hablado largo y tendido sobre sus virtudes y defectos pero todos los defectos que tenía, y hubieran podido ser reparados, no lo fueron y ahora estamos como estamos. Lo que era una salida, la Constitución, que muchos votamos, se ha convertido en letra muerta y hasta en excusa para la destrucción del Estado.
Como hemos comentado y probado aquí, España ha dejado de ser un Estado de Derecho y por lo tanto no es una democracia. La situación, en relación a los nacionalismos y en particular a Cataluña, y también de los privilegios de determinadas castas que no serán jamás condenadas en los tribunales hagan lo que hagan, por no hablar de esos poderes internacionales que saquean y dirigen España, no permite la aplicación no ya de la Constitución sino de la Ley.
El PSOE desde el tiempo de Rodríguez Zapatero ha decidido implementar una política ajena a su programa y al ordenamiento jurídico español. Los padres de la Constitución se preocuparon de poner difícil su reforma buscando amplios consensos, dando lugar a un suelo de Rawls; sin embargo, los socialistas han tirado por la calle de en medio ignorando la Ley gracias al control del Tribunal Constitucional.
Si vimos lo que ocurrió en la época de Zapatero con ETA, lo mismo está ocurriendo ahora, corregido y aumentado, con Pedro Sánchez, alias "Antonio". En ambos casos, primero como fiscal general y luego, ahora, como Presidente del Tribunal Constitucional, que lo es de reconocida lealtad aunque lo desdigan los mejores y hasta los más humildes juristas, aparece el cerebro gris de esta chapuza Cándido Conde Pumpido.
¿Quién fue el que posibilitó el acuerdo de renovación del Tribunal Constitucional y del Tribunal de Cuentas? La camarilla de gobierno del PP y finalmente su sustituto por un tiempo Pablo Casado. Esto nos da una idea desde dónde vienen, nos preguntamos, los cambios inconstitucionales que se llevan a cabo. El trampantojo de la no renovación del CGPJ oculta estas maniobras traicioneras; ¿de qué sirve que jueces independientes condenen a los políticos si existen los indultos o la amnistía?
Dicen las encuestas que el 70% de los votantes de la izquierda creen que la Constitución del 78 no es válida. Algunos argumentan que las nuevas generaciones no la han votado pero ambas afirmaciones son falsas y lo que se demuestra es que la ventana de Overton está funcionando a la perfección, los zombis de la izquierda se hacen eco de lo que quieren sus facciones políticas.
La Constitución con sus defectos y virtudes, con sus necesidades de reforma que son distintas según un partido u otro, es perfectamente válida desde que se aprobó y es el soporte del sistema jurídico español; para reformarla existe su Título X pero hay que tener las mayorías para cada reforma, si ésta no sale sigue vigente lo anterior. Todas las generaciones votan la Constitución siempre que hay elecciones según los partidos y los programas; las nuevas Cortes crean la comisión constitucional, tanto en el Congreso como en el Senado, y los posibles proponentes pueden enviar sus proyectos a estas comisiones; otra cosa es que no lo hagan por carecer de mayorías suficientes.
https://www.eldiestro.es/2023/12/constitucion-del-78-rip/
https://www.libertaddigital.com/opinion/2023-12-08/jesus-lainz-delenda-est-constitutio-7077373/
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